jueves, 1 de noviembre de 2018

RECIBIR FEEDBACK NEGATIVO ¡OPORTUNIDAD DE MEJORA!



La palabra proviene del inglés, y se compone del verbo to feed, que significa ‘alimentar’, y back, que traduce en español ‘atrás’ o ‘retorno’. Su traducción puede ser ‘realimentación’ o ‘retroalimentación’. Podemos utilizarla como sinónimo de respuesta o reacción.
                                                         
En el proceso comunicativo, es toda respuesta o reacción relevante que el receptor envía al emisor de un mensaje, y que sirve a este último para:
Asegurar que el mensaje cumplió su intención comunicativa, y para que el emisor pueda variar, reconfigurar o adaptar el mensaje al receptor
según la respuesta que vaya obteniendo de éste.
El receptor completa el proceso de comunicación con el feedback, es decir, la respuesta o reacción del receptor al mensaje enviado.

El feedback, sea negativo o positivo, es una herramienta de suma importancia en las organizaciones tanto para los empleados como para los gerentes, ya que permite mejorar diferentes aspectos del comportamiento organizacional.
Es la acción de opinar, evaluar y considerar el desempeño de una persona o grupo de personas en la realización de un trabajo o tarea. Como tal, es una acción que revela las fortalezas y debilidades, los puntos positivos y negativos de la labor realizada con el fin de corregirla, modificarla o mejorarla.
El feedback es fundamental en el crecimiento profesional o personal de cualquier empleado; le permite mejorar y detectar sus puntos fuertes.


Hoy daremos unas ideas de Cómo abordar el feedback negativo.

Nadie es perfecto, y todos hemos recibido feedback negativo en algún momento  de nuestra trayectoria personal y profesional.
El feedback negativo es inevitable si lideras un equipo.
El principal objetivo del feedback negativo ha de ser mejorar.
Recibir el  “feedback negativo” de los empleados puede convertirse en oportunidad.

¿Qué hacer al recibir feedback negativo?

Antes de discrepar, entiende.
Cambia la idea que se tiene sobre las quejas o críticas.
Aprende a recibir feedback mediante escucha activa y procesando la información que recibes.
Pierde el miedo a responder. No te quedes  callado. Siempre hay que contestar con cercanía y honestidad, aunque se trate de un tema incómodo.
Si es posible date tiempo, párate a pensar antes de responder.
Mantén la cabeza fría para identificar los comentarios que no aportan nada. Sé amable, pero firme.
Debes afrontar ese momento con la delicadeza y empatía necesarias; pensando, además, en qué persona te brinda el feedback.
Aprende a aprender de las críticas.
No le des demasiadas vueltas. Los comentarios negativos se alimentan de nuestras inseguridades personales.

Los beneficios de mantener un clima de comunicación constante y transparente son innegables.
Recuerda que estás ante una oportunidad de mejorar, por lo que debes prestar atención y entender exactamente cuál es el problema.
El feedback te da poder, ya que conocer tus debilidades es el primer paso para eliminarlos.
Las principales claves para tener una comunicación productiva con los componentes del equipo  son la transparencia y la honestidad.



¿Crees que das y recibes suficiente feedback?
¿En tu organización hay cultura de comunicación honesta?
¿Te sirve de algo?,  ¿Ves mejoras?

No hay comentarios:

Publicar un comentario